Sn muchos los diarios que se han hecho eco de la gran expeactacion que ayer, ante el hotel AC de Gijon, habia. Y es que a pesar de que la firma de autografos del Guaje no era hasta las 20.15, muchos de los seguidores del delantero llevaban horas esperandolo. Alli se congregaron mas de 2.000 personas, ademas de varios cientos en el aeropuerto de Gijon.
Yo, por mi parte, os dejo un articulo sobre esa tarde, en el que nos describe como fue y nos acopla varias declaraciones del Guaje. Firmado por Luis Furio:
Villa Superstar. David es un crack mediático y a la vez un chaval humilde. Ha sabido conjugar las dos cualidades y eso se palpó ayer en Gijón, donde su presencia desató la locura colectiva. La vuelta del Guaje a su Asturias natal se desarrolló tal y como se esperaba. En torno a un millar de aficionados le esperaban ansiosos, apostados en la puerta del hotel donde se hospedó el equipo. Cuando llegó el autobús naranja que trasladaba a los futbolistas desde el aeropuerto, fue el no va más. La apoteosis. Gritos. "¡Villa, Villa, Villa, maravilla!". Lágrimas. Emoción desbordada.
Una foto, una firma, un gesto, una sonrisa... Todos le pedían algo. Increíble. Una enorme marabunta de aficionados, en su mayor parte jóvenes seguidores del Sporting, quería estar al lado de su ídolo, de quien ya hace bastante tiempo que se ha convertido en un mito para los asturianos.
¿Villa es más mediático que Fernando Alonso? El Guaje sonríe. "No lo sé. Lo que sí puedo decir es que estoy muy orgulloso de venir aquí y de que la gente me dé su cariño. Y yo se lo agradezco de corazón. Seguro que desearán que profesionalmente siga igual de bien para continuar disfrutando de mis éxitos".
Rodeando el edificio del establecimiento hotelero se había organizado una cola de cerca de cuatrocientos metros. Policía nacional, seguridad privada, empleados... Orden y control. Lo nunca visto. La mayoría de los seguidores había llegado sobre las cuatro de la tarde -la expedición lo hizo pasadas las siete y media-, aunque algunos más entusiastas aguardaban allí desde el mediodía. Querían ser los primeros.
En el aeropuerto de Manises, justo instantes antes de embarcar camino de Gijón, Villa vivió un aperitivo de lo que le esperaba en "su casa". En la terminal del aeropuerto de Avilés hubo enorme expectación, con varios centenares de aficionados esperando a lo jugadores y en especial al Guaje. Y poco después, ya en la ciudad, en el hotel, la histeria. El gentío envolvió a Villa que, antes de comparecer en el acto de firma que organiza el club, ofreció una breve conferencia de prensa en la que reconoció que aunque a través de amigos y familiares le habían advertido del recibimiento, "no podía imaginarme que hubiera tanta gente. No sé si voy a tener tiempo de poder firmar y atender a todos, pero lo intentaré para que se vayan contentos, sobre todo después del tiempo que llevan esperando".
El futbolista de Tuilla no quiere que todo el ambiente que le rodea en estas horas en Gijón pueda influirle emocionalmente. "Influye el cariño que te tiene la gente, pero todos son conscientes de que necesito trabajar para mi equipo y que mañana (por hoy) es lo que haré. Probablemente va a ser el encuentro más extraño para mí, pero no el más importante. Si sale o no un buen partido, desde luego no será por los sentimientos. Yo jugaré para que el Valencia pueda beneficiarse de mi trabajo".
Villa no daba abasto. Le entraban por todos los lados y él quería cumplir con todos. Abrazos a amigos, a familiares... Y un encuentro muy especial con el Brujo Quini, muy recuperado de su enfermedad, que le dio un fuerte abrazo. "Estoy muy satisfecho de haberle visto tan animado, aunque la verdad es que es como si hubiéramos estado juntos, porque toda la semana llevamos hablando por teléfono..." Para Villa la vuelta a casa supuso también el reencuentro con dos de las que fueron sus profesoras del colegio Jerónimo González, en Sama de Langreo. La de Educación Física y la de Lengua que, junto con algunos jóvenes alumnos, acudieron para hacerle entrega de una camiseta del centro.
"Volver ha sido muy importante. Hace mucho tiempo que lo deseaba y después de este recibimiento, me siento muy emocionado", confesó en un momento en el que parecía tener los ojos vidriosos. "También tengo ganas de jugar en El Molinón. Sé que me esperan momentos muy intensos, con sensaciones raras. Hacía tiempo que no veía por aquí, porque es difícil hacerlo, salvo en vacaciones de verano o de Navidad".
Yo, por mi parte, os dejo un articulo sobre esa tarde, en el que nos describe como fue y nos acopla varias declaraciones del Guaje. Firmado por Luis Furio:
Villa Superstar. David es un crack mediático y a la vez un chaval humilde. Ha sabido conjugar las dos cualidades y eso se palpó ayer en Gijón, donde su presencia desató la locura colectiva. La vuelta del Guaje a su Asturias natal se desarrolló tal y como se esperaba. En torno a un millar de aficionados le esperaban ansiosos, apostados en la puerta del hotel donde se hospedó el equipo. Cuando llegó el autobús naranja que trasladaba a los futbolistas desde el aeropuerto, fue el no va más. La apoteosis. Gritos. "¡Villa, Villa, Villa, maravilla!". Lágrimas. Emoción desbordada.
Una foto, una firma, un gesto, una sonrisa... Todos le pedían algo. Increíble. Una enorme marabunta de aficionados, en su mayor parte jóvenes seguidores del Sporting, quería estar al lado de su ídolo, de quien ya hace bastante tiempo que se ha convertido en un mito para los asturianos.
¿Villa es más mediático que Fernando Alonso? El Guaje sonríe. "No lo sé. Lo que sí puedo decir es que estoy muy orgulloso de venir aquí y de que la gente me dé su cariño. Y yo se lo agradezco de corazón. Seguro que desearán que profesionalmente siga igual de bien para continuar disfrutando de mis éxitos".
Rodeando el edificio del establecimiento hotelero se había organizado una cola de cerca de cuatrocientos metros. Policía nacional, seguridad privada, empleados... Orden y control. Lo nunca visto. La mayoría de los seguidores había llegado sobre las cuatro de la tarde -la expedición lo hizo pasadas las siete y media-, aunque algunos más entusiastas aguardaban allí desde el mediodía. Querían ser los primeros.
En el aeropuerto de Manises, justo instantes antes de embarcar camino de Gijón, Villa vivió un aperitivo de lo que le esperaba en "su casa". En la terminal del aeropuerto de Avilés hubo enorme expectación, con varios centenares de aficionados esperando a lo jugadores y en especial al Guaje. Y poco después, ya en la ciudad, en el hotel, la histeria. El gentío envolvió a Villa que, antes de comparecer en el acto de firma que organiza el club, ofreció una breve conferencia de prensa en la que reconoció que aunque a través de amigos y familiares le habían advertido del recibimiento, "no podía imaginarme que hubiera tanta gente. No sé si voy a tener tiempo de poder firmar y atender a todos, pero lo intentaré para que se vayan contentos, sobre todo después del tiempo que llevan esperando".
El futbolista de Tuilla no quiere que todo el ambiente que le rodea en estas horas en Gijón pueda influirle emocionalmente. "Influye el cariño que te tiene la gente, pero todos son conscientes de que necesito trabajar para mi equipo y que mañana (por hoy) es lo que haré. Probablemente va a ser el encuentro más extraño para mí, pero no el más importante. Si sale o no un buen partido, desde luego no será por los sentimientos. Yo jugaré para que el Valencia pueda beneficiarse de mi trabajo".
Villa no daba abasto. Le entraban por todos los lados y él quería cumplir con todos. Abrazos a amigos, a familiares... Y un encuentro muy especial con el Brujo Quini, muy recuperado de su enfermedad, que le dio un fuerte abrazo. "Estoy muy satisfecho de haberle visto tan animado, aunque la verdad es que es como si hubiéramos estado juntos, porque toda la semana llevamos hablando por teléfono..." Para Villa la vuelta a casa supuso también el reencuentro con dos de las que fueron sus profesoras del colegio Jerónimo González, en Sama de Langreo. La de Educación Física y la de Lengua que, junto con algunos jóvenes alumnos, acudieron para hacerle entrega de una camiseta del centro.
"Volver ha sido muy importante. Hace mucho tiempo que lo deseaba y después de este recibimiento, me siento muy emocionado", confesó en un momento en el que parecía tener los ojos vidriosos. "También tengo ganas de jugar en El Molinón. Sé que me esperan momentos muy intensos, con sensaciones raras. Hacía tiempo que no veía por aquí, porque es difícil hacerlo, salvo en vacaciones de verano o de Navidad".
2 comentarios:
ERES EL MEJOR FUTBOLISTA SIGUE ASÍ!!
SOLO DV SOLO DV SOLO DV SOLO DV
DV CONTIGO HASTA EL FINAL YT CUANDO DIGO HASTA EL FINAL ES HASTA EL FINAL
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