-Por fin llegó el ansiado día de volver a jugar en El Molinón.
-Pues sí, ya por fin. Después de seis años esperándolo, estoy muy contento de volver y espero que sea un día muy feliz.
-¿Será difícil para usted?
-Más que difícil, será raro. He pensado en él, aunque todavía no me planteo muy bien cómo será verme en ese campo, como visitante y enfrentándome a la camiseta del Sporting. Será un poco extraño.
-¿El más raro de su carrera?
-Sí. Ya viví algo que se puede asemejar un poquito con el regreso a Zaragoza, pero lo cierto es que no tiene nada que ver el sentimiento que me provoca el Sporting con el de entonces.
-¿Qué recibimiento espera?
-Será muy emotivo. La afición del Sporting siempre me ha dado mucho cariño, tengo muchos amigos y familia que irán al campo y son socios. Me han contado que siempre que marca el Valencia el público aplaude. Ahora voy como rival y es una afición que se entrega mucho al Sporting y que nos va a poner las cosas muy difíciles.
-¿Sabe que también se coreó su nombre en cada uno de los cuatro goles que Raúl le marcó al Sporting esta temporada?
-Sí, me lo dijeron. Estoy al tanto de todo lo que pasa en Gijón. Son muestras de cariño. Después de tanto tiempo sin jugar en el Sporting es muy importante para mí que esa afición se sienta identificada conmigo.
-¿Cómo será la despedida si usted marca?
-Está claro que voy a intentar marcar porque lo dicta mi profesionalidad y por el bien del Valencia, que es el equipo al que defiendo ahora. Lo que intentaré será no exteriorizar nada y, sobre todo, respetar a esa gente que tanto me dio.
-Dada la situación del Sporting, ¿serían goles dolorosos?
-Sí, claro. Si marco serán los goles más feos o más dolorosos de mi carrera, pero son cosas por las que tengo que pasar y por las que llevo mucho tiempo deseando pasar porque indican que tanto yo como el Sporting estamos en Primera.
-¿Cómo ve al Sporting?
-Con algunos altibajos. Creo que está jugando muy bien, aunque no está teniendo mucha suerte, sobre todo en los dos últimos partidos. Fue netamente superior al Racing, pero las decisiones arbitrales, la falta de acierto arriba y la eficacia del Racing hicieron que se fueran los puntos. Estoy totalmente convencido de que van a salir de ahí, con trabajo y con sufrimiento.
-De su etapa en el Sporting sólo queda Sastre.
-Sí, es el único, aunque también conozco a Bilic de una pretemporada en Zaragoza.
-¿Le distraerá tanta emoción?
-No lo sé. Espero que no me influya y poder hacer un buen partido en la vuelta a casa. Nunca me he visto en una situación como ésta.
-Sí, más que nada fue por precaución. Siempre me suele pasar lo mismo. Cuando salgo de una lesión, en lugar de entrar poco a poco, salgó de titular y suelo tener recaídas. Yo siempre quiero jugar. Jugué con la selección, luego tuve que descansar ante Turquía, y ahora me ha pasado lo mismo tras el intenso partido ante el Getafe. Si no pasa nada raro, no me voy a perder el partido de Gijón.
-¿Hay ánimo de desquite por el partido de la primera vuelta entre sus compañeros?
-De desquite no, porque el Sporting fue superior a nosotros y ahora queremos recuperar esos tres puntos. Estamos en un momento en el que, tras prácticamente perder el tren del cuarto puesto, en dos jornadas nos hemos situado a dos puntos y lo volvemos a tener a tiro.
-Con los tres primeros tan fuertes, ¿el objetivo del Valencia es meterse en Liga de Campeones?
-Sí, está claro que nuestro objetivo es la cuarta plaza. Los tres primeros están muy lejos y, en tan pocas jornadas, será muy complicado cogerles. La cuarta plaza da acceso a la Liga de Campeones, aunque tengamos que jugar la fase previa. La tenemos a dos puntos y tenemos que jugar con el Villarreal. Dependemos de nosotros mismos para conseguir esa cuarta plaza que supondría una inyección de moral y económica
-Pues sí, ya por fin. Después de seis años esperándolo, estoy muy contento de volver y espero que sea un día muy feliz.
-¿Será difícil para usted?
-Más que difícil, será raro. He pensado en él, aunque todavía no me planteo muy bien cómo será verme en ese campo, como visitante y enfrentándome a la camiseta del Sporting. Será un poco extraño.
-¿El más raro de su carrera?
-Sí. Ya viví algo que se puede asemejar un poquito con el regreso a Zaragoza, pero lo cierto es que no tiene nada que ver el sentimiento que me provoca el Sporting con el de entonces.
-¿Qué recibimiento espera?
-Será muy emotivo. La afición del Sporting siempre me ha dado mucho cariño, tengo muchos amigos y familia que irán al campo y son socios. Me han contado que siempre que marca el Valencia el público aplaude. Ahora voy como rival y es una afición que se entrega mucho al Sporting y que nos va a poner las cosas muy difíciles.
-¿Sabe que también se coreó su nombre en cada uno de los cuatro goles que Raúl le marcó al Sporting esta temporada?
-Sí, me lo dijeron. Estoy al tanto de todo lo que pasa en Gijón. Son muestras de cariño. Después de tanto tiempo sin jugar en el Sporting es muy importante para mí que esa afición se sienta identificada conmigo.
-¿Cómo será la despedida si usted marca?
-Está claro que voy a intentar marcar porque lo dicta mi profesionalidad y por el bien del Valencia, que es el equipo al que defiendo ahora. Lo que intentaré será no exteriorizar nada y, sobre todo, respetar a esa gente que tanto me dio.
-Dada la situación del Sporting, ¿serían goles dolorosos?
-Sí, claro. Si marco serán los goles más feos o más dolorosos de mi carrera, pero son cosas por las que tengo que pasar y por las que llevo mucho tiempo deseando pasar porque indican que tanto yo como el Sporting estamos en Primera.
-¿Cómo ve al Sporting?
-Con algunos altibajos. Creo que está jugando muy bien, aunque no está teniendo mucha suerte, sobre todo en los dos últimos partidos. Fue netamente superior al Racing, pero las decisiones arbitrales, la falta de acierto arriba y la eficacia del Racing hicieron que se fueran los puntos. Estoy totalmente convencido de que van a salir de ahí, con trabajo y con sufrimiento.
-De su etapa en el Sporting sólo queda Sastre.
-Sí, es el único, aunque también conozco a Bilic de una pretemporada en Zaragoza.
-¿Le distraerá tanta emoción?
-No lo sé. Espero que no me influya y poder hacer un buen partido en la vuelta a casa. Nunca me he visto en una situación como ésta.
-Sí, más que nada fue por precaución. Siempre me suele pasar lo mismo. Cuando salgo de una lesión, en lugar de entrar poco a poco, salgó de titular y suelo tener recaídas. Yo siempre quiero jugar. Jugué con la selección, luego tuve que descansar ante Turquía, y ahora me ha pasado lo mismo tras el intenso partido ante el Getafe. Si no pasa nada raro, no me voy a perder el partido de Gijón.
-¿Hay ánimo de desquite por el partido de la primera vuelta entre sus compañeros?
-De desquite no, porque el Sporting fue superior a nosotros y ahora queremos recuperar esos tres puntos. Estamos en un momento en el que, tras prácticamente perder el tren del cuarto puesto, en dos jornadas nos hemos situado a dos puntos y lo volvemos a tener a tiro.
-Con los tres primeros tan fuertes, ¿el objetivo del Valencia es meterse en Liga de Campeones?
-Sí, está claro que nuestro objetivo es la cuarta plaza. Los tres primeros están muy lejos y, en tan pocas jornadas, será muy complicado cogerles. La cuarta plaza da acceso a la Liga de Campeones, aunque tengamos que jugar la fase previa. La tenemos a dos puntos y tenemos que jugar con el Villarreal. Dependemos de nosotros mismos para conseguir esa cuarta plaza que supondría una inyección de moral y económica
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