EN Mestalla espera al Athletic una bestia, una pesadilla, un delantero centro letal. David Villa. Como sucede en la sabana africana, el asturiano ché tiene como objetivo a los animales más fieros. A losleones. Un cazador. Un furtivo. Guarda la cabeza de sus presas bajo un aura de misticismo en su hogar. Diez veces ha cazado en la manada de los reyes de la selva. Una decena de tantos ha alojado el de Langreo en la portería rojiblanca. El último, en el césped de La Catedral, bajo la atenta mirada de los aficionados bilbainos. Dicho disparo supuso el empate en el marcador, ya que Iker Muniain había golpeado primero -solamente tres minutos antes-. Mathieu hizo el segundo gol valencianista y el sueño se esfumó tan pronto como el cazador atinó.
En ese encuentro, un central con nombre de santo apareció en escena. Mikel San José debutaba en Liga en San Mamés. Todo un reto. El cazador valencianista no tuvo piedad. "Son un gran bloque, juegue el que juegue lo hará bien. Habrá que esta muy concentrados para sacar adelante el choque", explica el iruindarra refiriéndose a la amplia gama de futbolistas que Unai Emery posee en ataque. Sin embargo, la pesadilla sigue teniendo nombre propio: Villa, que de los 137 goles que ha marcado, diez han sido al Athletic. Y en los últimos cuatro enfrentamientos ha sumado, al menos, un gol. El Guaje anotó en los dos encuentros de la pasada campaña: en la victoria en Mestalla por 2-0 y en la derrota en Bilbao por 3-2. También consiguió el tanto del honor de su equipo en la goleada sufrida en 2008 por 5-1. Osasuna, con diez goles recibidos, es su otra víctima favorita. Saborea la carne vasca.
El de La Txantrea será el encargado de amarrar en corto a un delantero "rapidísimo". Pero no solamente en él se fundamenta el peligro del Valencia. Joaquín, David Silva, Juan Mata o Pablo Hernández son otros de los jugadores a tener en cuenta. San José los califica como "muy verticales". "Todos se mueven mucho y disfrutan con el contraataque", esgrime el defensa. Al contragolpe son los reyes y, con una delantera en la que el cazador Villa es su punta de lanza, la preocupación es máxima. No se debe fiar el central navarro de la sequía que el de Langreo acumula, ya que la última vez que marcó fue frente al Atlético de Madrid en Liga Europa. Los delanteros se mueven por rachas, pero Villa es mortal de necesidad y tiene ansia de león. De hincarle el diente a los felinos.
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