La amabilidad de Villa con los aficionados ocasionó un retraso de veinte minutos en la salida de la expedición valencianista del aeropuerto de Asturias en autocar hasta Gijón . Fue el tiempo que el Guaje dedicó a firmar autógrafos y a hacerse fotos. Fans como Iara, de 17 meses, con la camiseta del Valencia y el dorsal 7 de Villa, obtuvieron la rúbrica del futbolista de Tuilla. Otro tanto le sucedió a Sergio Menes, praviano de 8 años, que portaba la camiseta del Sporting, y Villa también se la dedicó. «Es mi ídolo, como también Xavi del Barça, y siempre mete goles. No me gusta tanto Mata porque jugó en el Oviedo», explica el joven seguidor rojiblanco, emocionado al recibir su autógrafo. A la llegada al hotel gijonés otros 200 aficionados aguardaban la llegada del Valencia y muchos fueron los gritos de ánimo cuando del autobús bajó Villa. Varios futbolistas firmaron autógrafos, pero fueron el ovetense Juan Mata y sobre todo el langreano y ex sportinguista David Villa quienes se quedaron más de un cuarto de hora poniendo su firma en camisetas, pósteres, balones y hasta en alguna bota de fútbol. Villa demostró una vez más que es una estrella en el más amplio sentido de la palabra, especialmente cuando regresa a su tierra.
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