jueves, 4 de marzo de 2010

Saint Denis se rinde ante España




A las 20.45h saltaba al campo un 11 por parte de España que convenció durante toda esa primera parte en la que mostraron sus cartas a todos. Y es que la Selección se hace grande allá por donde va, y cada vez, hay menos rivales grandes, porque prácticamente, nadie se resiste al juego de España, a esa personalidad que ya nos marca, ese juego que a través de toques y pases cortos, suma, partido tras partido, nuevos triunfos, bate récords y sobre todo, vence a selecciones tras años de continuas derrotas ante las mismas.


Esta noche fue el caso: hacía tantos años que España no ganaba a Francia en su casa que hay que recurrir a hemerotecas de hace más de 40 años, ya que de los últimos 8 partidos que ambas selecciones se enfrentaron, España tan sólo consiguió llevarse un empate, el resto, derrotas, para encontrar un triunfo de España sobre Francia. Pero esta vez no fue igual, porque esta vez, no contamos con los mismos jugadores. Sin desmerecer a todos los anteriores, esta generación de jugadores nació para jugar juntos. El propio estadio parisino coreaba al son de "Españas y olés", y eso sin importar la bandera que portasen, seguidores de uno y de otro bando, porque cuando un equipo juega bien, la afición es justa.





El encargado de abrir el marcador, no podía ser otro que el Guaje. A los 20 min del encuentro, ya se la había colado a Lloris a escasos metros del área y en prácticamente un 1 contra 1, delantero y portero, tras dejar atrás lo poco que quedaba de la defensa francesa en ese momento. Y aunque al comenzar el partido parecía que los galos nos tuviesen la medida tomada y apenas nos dejaban espacio para dar rienda suelta a nuestro juego, lo cierto es que tras ese primer gol del Guaje Villa, los franceses se vinieron abajo, y si al principio optaban por impedirnos atacar, a partir de ese momento decidieron jugar más a la pausa, lo que nos benefició y permitió a Sergio Ramos marcar el segundo en el descuento de la primera parte. Tanto merecido por el buen juego que demostró durante todo el encuentro.


A la vuelta del vestuario, el partido estaba prácticamente sentenciado, un 2 - 0 difícilmente remontable, debido sobre todo lo a la actitud que los franceses mostraron. En la segunda parte, el seleccionador también decidió agotar los cambios; llamó del campo a Villa, Puyol, Xabi Alonso, Silva, Cesc e Iniesta; para sustituírlos por Torres, Albiol, Senna, Güiza, Xavi y Navas. Lo que demuestra una cosa: en esta selección, nadie es imprescindible, y muy pocos conjuntos nacionales se pueden permitir el banquillo que tenía España durante la primera parte. Banquillo que en un principio, sorprendió, o incluso me atrevo a aformar que asustó a unos cuantos, y sin embargo, en la segunda parte, el equipo no convenció tanto como en la primera.


Próxima cita: 26 de Mayo.


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